Navidad 2015

Tiempo de Navidad

Diciembre es tiempo de Navidad. De Navidad en Badajoz. Como en tantas partes de este universo de personas y sentidos donde fechas tan históricamente señaladas permiten que las cosas se vean de otra manera, que las pasiones no se contengan, que los sentimientos se exterioricen y que los días se vivan con otra perspectiva.

Es Navidad una fiesta religiosa, sí, pero no deben quienes a ella se oponen (o a su carácter religioso) contrariarse con una celebración que tiene matices que trascienden a la religión. Es una fiesta cristiana, también, pero que supera las barreras doctrinales o teológicas donde se fundamenta y alcanza lo social, lo familiar, lo personal y lo humano. Y es, en fin, una fiesta con matices, valores y circunstancias, que la convierten en algo más, en mucho más que una fiesta. Es una celebración, un acontecimiento, una oportunidad, un tiempo para el recuerdo y la esperanza.

La Navidad habla de muchas cosas. Habla de Belén y un Portal, habla de un mensaje y una actitud ante la vida y la muerte, habla de sensaciones que pellizcan y despiertan las geografías más íntimas del alma. Habla la Navidad de conductas, creencias y expectativas pero, sobre todo, habla la Navidad del sentido de la vida. Y lo hace de muchas maneras: una reunión familiar, la mirada de un niño, un villancico sencillo, el recuerdo de los que ya no están, la emoción de esperar a alguien que está por llegar. Habla la Navidad de cosas que a veces no se pueden explicar pero que nos gusta sentir y experimentar.

Por eso es una fiesta. Porque festejamos cuanto sucede o sucedió en Navidad. Porque celebramos y reconocemos la paz, el amor, la proximidad, el entendimiento, la mano tendida, la solidaridad, la compañía y el sincero abrazo.